Iglesia de GAZEO
EL MENSAJE DE LAS PINTURAS DE GAzEO
CONFERENCIA DE JUAN JOSE LECUONA
Hace 45 años que un compañero de Agurain (Rafael Alvarez de Eulate) y yo descubrimos las pinturas de Gazeo y desde entonces las llevo en el corazón. A raíz del hallazgo hice un estudio de las mismas y uno de los capítulos del trabajo se titulaba “Iconografía de las pinturas”. En esta ocasión me han pedido que hable sobre el mensaje de las pinturas.
Antes de tratar sobre el tema quiero presentar unas notas que servirán de introducción.
Las pinturas de las iglesias sirven para cubrir los muros de mampostería, la piedra era pobre, se recubría de mortero y sobre el mortero se pintaba. Unas veces la pintura solía ser ornamental y otras iconográfica, como en el caso de Gazeo.
Cuando el tema era religioso el pintor quería transmitir un mensaje religioso. En otras ocasiones el mensaje solía ser de otro tipo. Cuando Picasso hizo el Gernika el mensaje que quiere trasmitir es un mensaje de horror.
En el tiempo en que se pintó la Iglesias de Gazeo, muchísima gente no sabía leer y para conocer lo que un cristiano ha creer le ponían en la iglesia esta pinturas.
El mensaje de Jesús y el mensaje que quiere transmitir la iglesia llega al pueblo fiel a través de las representaciones artísticas, a través de las esculturas o a través de las pinturas murales o a través de las pinturas sobre tabla o sobre lienzo. Lo que es la escritura para los letrados es la pintura para los iletrados, dice San Gregorio.
A través de la escultura y de la pintura artística nos presentan síntesis de doctrina a la que todo el mundo tiene acceso. Los temas que más gustaban a los artistas eran los temas del cielo, el juicio final, el infierno y también los pasajes de la vida de Cristo que ofrecía un temario muy rico.
Hoy no podemos vivir sin este lenguaje audiovisual. La sociedad de consumo nos está mandando constantemente mensajes para que compremos y consumamos cosas.
Cuando nosotros éramos niños, en la catequesis, nos daban unos catecismos que carecían de imágenes, solamente había texto escrito. Hoy los catecismos tienen muchísimas imágenes y los mensajes lo captan los niños a través de las imágenes. Así los pintores de la Edad media tenían en cuenta este problema por eso cuando pintaban solían colocar un letrerito al pie de las imágenes y así sabían si era San Antón o la Purísima Concepción.
MENSAJE DE LAS PINTURAS DE GAZEO
Para explicar el mensaje de las pinturas de Gazeo, nos guiaremos por las fotos de Juan Carlos Estepe.
La colocación de los temas está estudiado en este mural de Gazeo.
El cielo en lo alto del ápside, en el casquete cilíndrico de la bóveda. A este lugar se dirigían las miradas de la gente y del sacerdote cuando celebraba la misa de espaldas al pueblo.
El juicio en un lugar cercano al pueblo en el paramento cilíndrico del ábside lo mismo que la crucifixión.
El infierno a un lado del presbiterio, en la parte más baja.
La vida de Cristo se desarrolla en el muro del presbiterio y las bóvedas correspondientes del mismo.
Una última observación; en el tema de la Virgen parce ser que el pintor de Gazeo se limitó a representarla en la escena del calvario y en las escenas de la infancia.
En cada uno de estos temas del mural, hay un mensaje que llega hasta nosotros a través de las imágenes que contemplamos.
EL CIELO
Es la parte más importante, vemos la imagen de la Trinidad o el trono de la Gracia.
Dios padre sentado en el trono, presenta a su Hijo, atado a la cruz como un signo o como una señal de gracia. EL Espíritu Santo se cierne entre el Padre y el Hijo. En la escena vemos también el árbol de la cruz.
Los mensajes que nos llegan de esta escena son las siguientes: el evangelio de San Juan nos recuerda que Dio amó tanto al mundo que le dio a su propio Hijo. Un mensaje de bondad. De la herida del costado de Cristo manan la sangre y el agua. En ellas vemos nosotros la misericordia y la gracia. El árbol de la Cruz es el árbol de la Vida, está en relación con la idea de Cristo Vida.
Los santos están en el cielo, ante el trono de Dios, que es el manantial de la felicidad de los santos y el objeto de su contemplación. Hay varias categorías de Santos. Los apóstoles y las vírgenes a ambos lados de la Trinidad. Las vírgenes en un lugar preferente, parece que en la edad Media la virginidad era tenida en gran estima. Todos los santos están en actitud de alabanza.
El P. Esteppe ve en esta escena otro mensaje. Cristo aparecerá como juez y vendrá a separar a los buenos y a los malos y a pronunciar el veredicto del juicio final. Sus palabras están escritas en los carteles que llevan los ángeles a los lados de la Trinidad. Se han perdido algunas letras pero con las que hoy han quedado sabemos lo que estaba escrito.
"Venid benditos de mi Padre", al otro lado: "Id malditos" . estos son los que no han practicado las obras de misericordia. Unos están a un lado, los otros al otro.
EL JUICIO
En el paramento cilíndrico del ábside, a la derecha vemos como otro de los grandes temas del arte medieval; El Juicio. San Miguel del pesaje de los humanos. Está de pie, elegantemente vestido, ocupando el lugar central.
Esta representación aparece en el Egipto faraónico. Los sacerdotes egipcios imaginaron que los vicios y las virtudes serían pesados en los platillos de la balanza. Si el peso de las malas acciones inclinaba la balanza el culpable sería arrebatado al infierno, de lo contrario iría al cielo.
Este tema es repetido por los predicadores y los artistas de la Edad Media y se grabó en la imaginación popular por estas imágenes que contemplaban en las portadas de las iglesias y en el interior de las mismas.
En la liturgia de los difuntos se invoca a San Miguel para que conduzca al difunto a la morada de la luz eterna: Que el príncipe de los Angeles San Miguel te conduzca a la morada de la luz eterna que prometiste en otro tiempo a Abraham y a toda su posteridad.
Otro ángel, quizás el ángel de la guarda, da la mano a una figura de la balanza y le ofrece una corona. El tema de la coronación de los justos pertenece a la tradición más antigua del cristianismo. Es la corona de la justicia, de la que habla San Pablo y que Dios dará a quienes le sirven. El personaje que está a la izquierda según la tradición artística es Abraham. Los justos van al seno de Abraham. Allí estaba el lugar del consuelo y de la paz.
En otra de las oraciones que se rezan en las misas de los difuntos se dice: Parece que Abraham se asimila a Cristo. San Pablo quiere morir por estar con Cristo.
Este mensaje es esperanzador, saber que vamos a ir a los brazos de Cristo.
Estas escenas en el momento de la celebración de la muerte adquirían un dramatismo impresionante. La otra figura que llama la atención es la de Santa Marina. De su mano cuelga una cadena con a que sujeta a Satán.
Ella desde el cielo intercede por los que son tentados por el diablo, sobre todo en la hora de la muerte. Además está lanzando su mensaje a todos: Ella venció al demonio. Es para el cristiano un ejemplo a seguir. Dice el martirologio que en la cárcel fue terriblemente tentada por el diablo y con la señal de la cruz superó las tentaciones. Bonito mensaje.
EL INFIERNO
La vida ha terminado. El juicio ya se ha terminado. La sentencia ya está dada. Si no ofrecí mi pan al hambriento, si al sediento no día de beber, si mis manos no fueron sus manos no hay lugar en el cielo y el condenado tiene que ir al infierno. El infierno es el lugar más bajo del mural. El camino que conduce a él está a la altura de nuestros ojos. En la entrada del camino vemos el ángel que guarda esta puerta. En el libro del Génesis se dice que Dios puso un querubín a la entrada del paraíso para guardar el árbol de la vida y para que no pudieran volver los que allí habían ido.
Las imágenes que vemos en esta escena están tomadas del libro de Job, en el que se inspiraron los artistas. La boca del infierno está representada por la boca de un dragón: "De sus fauces salen las chispas de fuego y de sus narices humo como de una caldera…su soplo enciende los carbones y hace del abismo una olla hirviendo". Job 4 1 – 10-13 .
Hemos oído muchas veces hablar de la caldera de Pedro Botero y más de una vez hemos dicho a alguien "vas a ir de cabeza al infierno". Estos son dichos que tienen su origen en las representaciones de los artistas.
¿Qué mensaje nos quieren transmitir a través de éstas imágenes tan tétricas??
Nos quieren decir que el infierno está ahí. Que hay que tomar en serio el tema del amor…que con el amor no se juega.
¿Qué hacemos hoy cuando vemos estas imágenes tan grotescas?
Tal vez a algunos les produzcan risa.
A los mas sensatos, pueden parecerles que no concuerdan con lo que hemos dicho sobre la misericordia de Dios, con lo que decía Jesús en la Cruz; "Padre perdónales porque no saben lo que hacen".
Aquí podemos recordar el soneto famoso;
No me mueve mi Dios para quererte
El cielo que me tienes prometido
Ni me mueve el infierno tan temido
Para dejar por ello de ofenderte.
Tu me mueves, Señor, muéveme el verte
Clavado en la cruz y escarnecido.
LA CRUCIFIXION
Enfrente de la escena del juicio, está la otra escena, la de la crucifixión. Ocupa un lugar preferente. Está representado el hecho histórico de la muerte de Cristo, siguiendo la tradición románica. Junto a la cruz los cuatro personajes: La Virgen, San Juan y los soldados romanos.
El mensaje de la escena es este: "Me amó y se entregó por mí". Murió en la cruz perdonando. Murió abriendo las puertas del paraíso a uno de los ladrones que fueron crucificados con él. En la cruz nos dio a su madre. En esta escena también otro mensaje: el pueblo está viendo el mural mientras se celebra la misa.
En la misa se hace presente lo que tuvo lugar en el calvario. Sobre la cruz vemos dos ángeles que según rezan los epígrafes son Rafael y Gabriel.
Rafael, el que acompañó a Tobías y le libró de los peligros en el viaje, significa: "Medicina de Dios". Gabriel es el ángel de la Anunciación. Significa "fuerza de Dios".
Estos ángeles están para ayudar a Jesús en el momento de la agonía. Hay una curiosidad sobre estos dos ángeles.
Cuando se colocó el retablo en la iglesia en el año 1700, los vecinos de Gazeo compraron dos imágenes de Gabriel y Rafael y las colocaron sobre el retablo de la iglesia. Son dos piezas interesantes una de ellas estuvo en la exposición que se celebró en la sala Amárica con imágenes del siglo XVII. Durante mucho tiempo los anticuarios me dieron la lata para que se lo vendiera, pero, gracias a Dios, estas dos piezas están en la parroquia de Gazeo.
Hemos respetado la devoción de aquellos feligreses hacia los dos ángeles y hoy les pedimos que sigan dando fuerza a nuestra fe en estos tiempos difíciles.
La cruz que vemos en esta escena como la que se ve en los brazos del padre tiene forma de árbol. Un himno del Viernes Santo nos recuerda: "Jamás el bosque dio mejor tributo en hoja, en flor y en fruto. Dulce árbol donde la vida empieza con un peso tan dulce en la corteza".
LA VIDA DE CRISTO
Cuando contemplamos las escenas de la infancia de Jesús: Visitación, Nacimiento, etc..Recibimos un mensaje de ternura. Dios se hizo como uno de nosotros, paso por todas las limitaciones que pasamos nosotros. Dios puso a nuestro nivel, al nivel de los pobres, de los pequeños.
En la representación de la vida del predicador Jesús, apenas podemos decir nada de las imágenes porque no nos quedan restos de pintura. Las humedades que hubo en esta zona destruyeron las pinturas. A pesar de todo en alguna de las escenas adivinamos que el artista pintó la curación del ciego o la resurrección de Lázaro.
El mensaje de estas escenas es éste: "Jesús vino a sanar y a curar nuestras enfermedades. Vino a enseñarnos el camino del cielo y ya lo hemos recordado anteriormente, que Jesús no se saltó ninguna etapa, las recorrió todas, por eso por su pasión y su cruz llegó a la resurrección.
Del tiempo de Pascua, que abraca la Pasión, Muerte y Resurrección, Ascensión y Pentecostés tenemos un rico repertorio.
La pasión comienza con la entrada de Jesús en Jerusalén, continúa con la cena y el lavatorio de los pies. La agonía en el huerto y la tradición de Judas tienen lugar en Gazeo así como la flagelación. El camino hacia el Calvario también está expresado y la crucifixión. Como Pedro queremos saltarnos la pasión y llegar directamente a la Resurrección.
Es el relato de los evangelios puesto en imágenes. La pasión de Cristo es para los creyentes de todos los tiempos un tema muy querido. Después de la muerte de Cristo parece que los relatos de la pasión fueron los primeros escritos del Nuevo testamento.
Estos escritos pasaron después a los Evangelios. Han llegado hasta nosotros con toda clase de detalles.
Los cristianos recordamos a través del Via Crucis algunas escenas que están recogidas en los cuadritos que vemos en nuestras iglesias. En muchos pueblos y ciudades hay representaciones de la pasión en vivo y durante la semana santa que sacan en muchos lugares los pasos que recorren nuestras calles. El mensaje de la pasión está presente en la vida del creyente y no podía faltar en el mural de Gazeo.
Después de las escenas del Santo Entierro, el pintor pasa a relatar la resurrección. El centro lo ocupa la aparición a maría Magdalena. Después hay una escena que describe lo que dice un artículo del Credo: "Creo que descendió a los infiernos a sacar a los Santos Padres que estaban esperando su santo advenimiento".
Con las escenas de la Ascensión y Pentecostés termina el relato. No sé porqué el tema de la Resurrección ha quedado un poco marginado de la fe del pueblo cuando en realidad es el tema estrella que nunca debemos separarlo de la muerte. Creo que murió y resucitó, es la fe en la que nosotros nos hemos educado. Hoy la iglesia ha dado un gran realce a este tema con la celebración de la vigilia pascual, pero en dicha vigilia no vemos que acuda la gente masivamente a su celebración. Sabemos de memoria oraciones a Jesús crucificado y apenas rezamos a Jesús resucitado.
El mensaje del mural de Gaceo es este: Jesús vive, ha resucitado y nos acompaña. La muerte no es el final del camino sino un paso a la resurrección. Esto en la Edad media, lo vivían y lo tenían muy presente.
Conferencia de Juan José Lecuona
Cuadrilla de Salvatierra – Agurain
Catalogo Monumental de la Diócesis de Vitoria – Gasteiz
EL CABALLO ALVARO
PAULA GM
Kepa Ruiz de Eguino
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